martes, 26 de julio de 2016

"Psique reanimada por el beso del amor" de Antonio Canova



Psique (Alma) era la menor de tres hermanas princesas, pero a diferencia del resto de las mujeres, ella poseía una belleza e inteligencia únicas en todo el mundo conocido. Tan grandes eran sus atributos, que hasta la propia Afrodita (Diosa de la belleza) se sintió celosa y amenazada. Tanto así, que para saciar su inseguridad, le ordenó a su hijo, Cupido, que le lanzara una flecha oxidada para que un horrible monstro se transformara en su pareja.
Cupido obedeció a su madre y fue volando hasta Psique. Al llegar, encuentra a la princesa llorando abandonada en una piedra (El padre la dejó ahí obedeciendo al oráculo que le predijo que el futuro amoroso de su hija no iba a ser un buen hombre, sino una serpiente alada que la iba a poseer ahí mismo. El padre había consultado al oráculo por su preocupación de que ningún hombre se enamoraba de su hija a pesar de su gran belleza). Finalmente Cupido prepara su flecha oxidada, apunta, pero no logra disparar. Cupido se había enamorado de Psique desde el segundo en que la vio. Psique, encadenada en aquella piedra, llorando de tristeza, se duerme sin más remedio para su vida amorosa. Entrando en un gran dilema, en el cual se encontraba el desobedecer a Afrodita, Cupido decide rescatarla dormida y llevarla a su palacio.
Psique se despierta sola sin saber dónde está ni quién la rescató. De día disfrutaba del hermoso lugar y de noche venía un misterioso hombre, el cual no dejaba que lo reconociera, a hacerle el amor y dormir con ella en la oscuridad de su alcoba. El hombre le decía que la amaba y que confié en él. Psique estaba feliz, sentía que su futuro estaba cambiando gracias a este gran hombre del cual no tardo mucho en enamorarse.
Cupido no quería que lo reconociera porque quería que ella se enamorara de él como hombre y no como Dios.
Pero Psique empezó a dudar (Con la ayudada de las envidiosas de sus hermanas con matrimonios arreglados) y por momentos no estaba segura si el ser misterioso que la visitaba por las noches era el monstro que le predijo el oráculo o era un buen hombre. Para resolver este dilema (Y motivada por sus hermanas) decidió dejar de confiar en aquel ser y preparó un cuchillo y una lámpara de cera para esa noche.
Psique se aseguró que el misterioso hombre estuviera durmiendo y prendió la lámpara. No pudo creer la belleza de Cupido, con sus alas y su paz. Era nada más y nada menos que el Dios del amor su amante. De repente, una gota de cera caliente se derrama de la lámpara y quema a Cupido despertándolo. La decepción del Dios del amor fue tal, que se marcho en ese momento, pero sin antes decirle: “El Amor no puede vivir sin confianza”.
Psique no podía creer lo que había provocado y pensó: “Era mi esposo, y yo, miserable, no tuve fe en su palabra. ¿Se ha marchado para siempre? De todas maneras puedo pasar el resto de mi vida buscándolo. Si él no quiere ya amarme, yo sabré demostrarle mi amor" y le pidió ayuda a Afrodita. La Diosa de la belleza y el amor le crea una serie de pruebas en el inframundo para que demostrase su amor por su hijo. La última era entregarle un cofre a Proserpina con la condición de no abrirlo nunca. Psique no pudo evitar su curiosidad, y al abrirlo, un sueño mortal se apoderó de ella. Cupido nuevamente llega a ella durmiendo, pero esta vez, la despierta con un beso (Esta es la escena que representa Casanova) Luego la alzó con suavidad y levantó vuelo llevándola con él hasta el monte del Olimpo, donde Zeus los unió oficialmente en matrimonio para siempre.

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